• La castración es un procedimiento quirúrgico en el que los testículos se extirpan de un animal macho.
  • La castración evita la reproducción no deseada y puede ayudar a eliminar los efectos negativos de comportamiento causado por las hormonas masculinas, como la itinerancia y la agresión.
  • La castración también se puede realizar para tratar tumores testiculares y anales y algunos problemas de próstata.

¿Qué es la castración?

La castración, es un procedimiento quirúrgico que consiste en la extirpación de los testículos. Es un procedimiento quirúrgico común realizado en perros y gatos machos para eliminar la capacidad para impregnar a las hembras. La castración también se usa para tratar ciertas afecciones médicas, como el cáncer testicular, los tumores anales, y algunas formas de enfermedad de la próstata.

¿Cómo se realiza la castración?

La evaluación pre quirúrgica: Su médico veterinario puede recomendar una evaluación pre quirúrgica antes de castrar a su mascota. La evaluación pre quirúrgica puede incluir un examen físico para asegurarse de que su mascota es lo suficientemente saludable para soportar la cirugía. Un análisis de sangre pre anestésico también se puede recomendar. Esta prueba está diseñada para ayudar a identificar problemas que puedan aumentar los riesgos asociados con la cirugía o anestesia. Su médico veterinario puede querer utilizar análisis de sangre pre-anestésico para comprobar la existencia de varias condiciones médicas, incluyendo infección, anemia (bajo número de glóbulos rojos), hipoglucemia, insuficiencia de la capacidad de coagulación de la sangre, enfermedad hepática y enfermedad renal.

Si su mascota tiene problemas médicos preexistentes, como un problema cardíaco, su médico veterinario puede recomendar pruebas adicionales para determinar si se recomienda tomar precauciones o si la cirugía debe ser pospuesta o cancelada debido a razones de salud.

A veces, la evaluación pre quirúrgica puede llevarse a cabo en el día de la cirugía. Sin embargo, algunos médicos veterinarios realizan esta prueba a pocos días o semanas antes de que el procedimiento se programe.

Día de la Cirugía: Para reducir el riesgo de vómitos durante el procedimiento, por lo general se recomienda que las mascotas tengan el estómago vacío antes de someterse a la anestesia. Su médico veterinario probablemente le pedirá que se le retire la comida y los cuencos de agua de su mascota la noche antes de la cirugía. El día mismo de la cirugía no se le ofrece ni agua ni alimento a la mascota. Si su mascota come o bebe antes de someterse a la anestesia, informe a su veterinario, ya que es posible que su médico veterinario decida recomendar posponer la cirugía. Si su mascota recibe insulina o algún otro medicamento, pregunte a su médico veterinario lo que debe hacer el día de la cirugía. Se le puede aconsejar que ajustar la dosis del medicamento o dejar de administrar medicamentos ese día.

Antes de comenzar la cirugía, a su mascota se le aplicará la anestesia. Esto mantiene a su mascota quieta, dormida, y completamente libre de dolor durante la operación. Hay muchos tipos de anestesia, su veterinario elegirá la que sea mejor para su mascota. Algunos tipos se administran en forma de inyección, mientras que otros anestésicos son gases que se inhalan. Durante la anestesia, un pequeño tubo de plástico se inserta en la vía respiratoria del paciente para apoyar la respiración. El tubo está conectado a la máquina de gas anestésico para dar al paciente un flujo constante de gas anestésico y oxígeno. Durante este tiempo, el equipo veterinario también puede conectar un equipo de monitoreo para medir continuamente la frecuencia cardíaca, la respiración y el uso de oxígeno durante la anestesia.

Una vez que su mascota está dormida, el sitio quirúrgico es afeitado y lavado con una solución germicida. El área se cubre luego con paños estériles que ayudan a mantener el área quirúrgica estéril. El médico veterinario y sus auxiliares se preparan para la cirugía a través de repetidos lavados de manos con jabones germicidas y luego se ponen batas, gorros, mascarillas y guantes estériles. El mantenimiento de una total esterilidad ayuda a prevenir infecciones.

La cirugía de castración en un gato se realiza a través de una incisión que se hace directamente en la piel sobre el escroto. Los testículos son localizados y separados de las estructuras circundantes. A medida que los testículos se extirpan quirúrgicamente, los vasos sanguíneos se cierran y se verifica por duplicado que el sangrado haya parado antes de retornarlos al punto de incisión. El escroto no se sutura y se deja abierto para cicatrizar.

Para la cirugía de castración en un perro, la incisión se hace a unos pocos centímetros en frente del escroto. Los testículos son localizados y empujados hacia arriba a través de la incisión, y se separan de las estructuras circundantes. Al igual que con la castración felina, los vasos sanguíneos son cerrados y se verifica por duplicado que el sangrado haya parado antes de ser retornados al punto de incisión. En la castración canina, la incisión quirúrgica se cierra mediante sutura.

En algunos perros y gatos, uno o ambos testículos no descienden en el escroto tanto como deberían durante el desarrollo normal del animal. Cuando uno de los testículos (o en raras ocasiones, ambos testículos) no descienda, la afección se denomina criptorquidia. La criptorquidia es un problema médico porque el testículo no descendido puede permanecer en el abdomen, donde puede llegar a convertirse en cancerosos o causar otros problemas médicos. La castración es ligeramente diferente cuando el paciente tiene un testículo no descendido. En primer lugar se extirpa el testículo normal, como se ha señalado más arriba, pero el médico veterinario por lo general tiene que hacer una incisión separada (a veces en el abdomen) para extirpar el testículo no descendido.

Independiente del procedimiento que utilice su médico veterinario, se hará todo lo posible para mantener a su mascota lo más segura posible durante y después del procedimiento. Una vez finalizada la cirugía, la zona quirúrgica se limpia de nuevo, y al paciente  se le permite despertar de la anestesia. Después, se le controlará en un área de recuperación hasta que se despierte y este suficientemente estable como para irse a casa. Medicamentos adicionales para controlar el dolor se dan generalmente en este momento. Algunos hospitales mantienen a los pacientes quirúrgicos durante la noche, para que puedan ser atentamente observados y monitoreados por el personal del hospital, sin embargo, otros hospitales permiten que las mascotas se recuperen en casa.

Atención en el hogar después de la cirugía

Incluso la mejor y más exitosa cirugía puede resultar en complicaciones si el cuidado postoperatorio es insuficiente. Su equipo veterinario revisará sus instrucciones de atención domiciliar antes de retornar su mascota a casa. Asegúrese de seguir todas las instrucciones y consulte a su equipo veterinario si tiene preguntas o inquietudes después de llegar a casa. Estos son sólo algunos consejos:

Alimentos y agua: Usted puede tener la tentación de dar a su mascota una comida grande después de su regreso a casa después de la castración. ¡No lo haga! Porciones pequeñas de alimento se recomiendan generalmente por lo menos para el primer día. Pregunte a su equipo veterinario cuando se pueden reanudar las comidas normales.

Puntos de sutura: Su mascota puede tener puntos de sutura en la parte externa de la piel después de la cirugía, pero algunos médicos veterinarios optan por enterrar a los puntos de sutura debajo de la piel o por utilizar adhesivo quirúrgico para cerrar la incisión. Algunos materiales de sutura son solubles y no necesitan ser removidos, mientras que otros puntos de sutura deben ser removidos después de la cirugía (por lo general en 7 a 14 días). Su médico veterinario examinará estos y otros detalles de cuidado en el hogar antes de permitir el retorno de su mascota a casa después de la cirugía. Incluso si los puntos no están presentes, observe la incisión regularmente para determinar si hay inflamación, sangrado, moretones, o descarga e informe de cualquier problema a su médico veterinario.

La protección de la incisión: No debe permitir que su mascota se lama o muerda el área quirúrgica. Esto puede abrir la incisión o causar una infección grave. Su médico veterinario puede recomendar que su mascota lleva puesto un collar isabelino para evitar la manipulación de la incisión y suturas. Se trata de un cono de plástico (como una pantalla de lámpara al revés) que se coloca sobre la cabeza de su mascota para evitar que llegue a lamer o morder el área quirúrgica.

Medicamentos: Asegúrese de darle a su mascota todos los medicamentos de acuerdo a las indicaciones de su médico veterinario. Si su mascota vomita después de recibir la medicación o tiene otras complicaciones, llame a su médico veterinario.

Restricción de actividad: Si es posible evite que su mascota corra, salte, o use escaleras durante aproximadamente 7 a 10 días después de someterse a cirugía de castración. La actividad excesiva puede causar dolor, sangrado, hinchazón de la incisión, y otras complicaciones. Incluso si su mascota parece estar perfectamente bien y quiere estar activa, siga la restricción de actividad según lo recomendado por su médico veterinario.

¿Cuáles son los beneficios de la castración?

Hay muchos beneficios asociados a la castración de su mascota. Lo más importante es que la castración ayuda a reducir la sobrepoblación de mascotas. La esterilización también previene el cáncer testicular, es útil en el tratamiento de ciertos tumores anales, y reduce el riesgo de ciertos problemas de próstata. La esterilización puede reducir comportamientos masculinos negativos asociados con la testosterona, como la itinerancia y la agresión. En los gatos machos, la castración reduce la potencia de olores desagradables de la orina del gato macho entero y reduce la probabilidad del marcado de territorio con orina además de otros comportamientos negativos.

Para la mayoría de las mascotas, los beneficios de la castración superan ampliamente los riesgos potenciales. La decisión de castrar o no es importante, así que asegúrese de discutir este problema de salud con su médico veterinario.