Corgi walking
Muchos perros que tienen flatulencia crónica sufren de intolerancia a uno o más componentes en sus dietas. Ellos no tienen la capacidad de digerir correctamente o absorber ciertos ingredientes, lo que se conoce como "intolerancia alimentaria." Como resultado, la bacteria que digiere los alimentos en los intestinos responde mediante la producción de gases en exceso.

Para la mayoría de los perros, sin embargo, la flatulencia ocurre sólo de vez en cuando, cuando sus bacterias intestinales no están preparadas para manejar un ataque repentino de ingredientes nuevos. Esta es la razón por la que alimentar con sobras de la barbacoa a tu perro se considera algo malo si se le dan esas cositas ricas sólo de vez en cuando – y debes considerarse afortunado si solo lo que sale de él es un poco de gas desagradable.

Otros problemas también pueden causar gas. De hecho, cualquier problema gastrointestinal que afecta a la digestión y la absorción de nutrientes – como la enfermedad inflamatoria intestinal, insuficiencia pancreática exocrina y enteritis bacteriana o viral – pueden producir un poco de asombroo gas pútrido de mascota.