• La anestesia es útil para muchos procedimientos, incluyendo la cirugía, biopsias, radiografías y exámenes y limpiezas dentales.
  • Su veterinario puede seleccionar anestesia local, anestesia general inyectable, o anestesia general inhalada para mantener a su mascota libre de dolor durante los procedimientos quirúrgicos o de diagnóstico.
  • Su veterinario está ampliamente capacitado en la realización de la anestesia y tomará todas las precauciones posibles para asegurarse de que su mascota se despierte de forma segura.

¿Qué es la anestesia?

La anestesia se define como "la pérdida de la capacidad de sentir dolor." Sin embargo, el término anestesia es más comúnmente utilizado para referirse a un estado de sedación profunda o pérdida del conocimiento durante el cual el paciente es incapaz de sentir dolor.

Se utilizan dos formas de anestesia en gatos. Para algunos pacientes, la anestesia local es una opción. Esto implica causar entumecimiento localizado mediante la inyección de medicación en un área focal de la piel o la aplicación de un medicamento en un área de la piel. El área afectada puede incluir la piel, los músculos subyacentes, y los nervios. Los medicamentos utilizados para la anestesia local no hacen que el paciente se duerma; la anestesia general es una mejor opción cuando se requiere sedación profunda o pérdida del conocimiento. Los medicamentos utilizados para la anestesia general comúnmente se administran por inyección o inhalación a través de una máscara anestésica o tubo de respiración que está conectado a una máquina de anestesia.

¿Cuándo se utiliza la anestesia?

La anestesia tiene muchos usos en los gatos. La anestesia local puede ser una opción si el veterinario tiene que quitar un pequeño crecimiento en la piel de su gato, lleve a cabo una biopsia de un tumor o área de la piel, usar puntos para cerrar un pequeño corte o herida, o realizar cualquier tipo de procedimiento mínimamente doloroso durante el cual la inconsciencia no es necesaria.

La anestesia general se utiliza para cirugías más invasivas y procedimientos que pueden ser muy dolorosos. Como ejemplos tenemos la reparación de un hueso roto o cirugía en las cavidades abdominal o torácica.

La cirugía no es la única oportunidad en que se recomienda la anestesia. Los gatos generalmente requieren anestesia o sedación muy pesada antes de limpiezas dentales, radiografías dentales, o los exámenes dentales completos. La anestesia se utiliza a veces para tomar radiografías de otras áreas del cuerpo, especialmente si el paciente siente dolor y el posicionamiento para los rayos X causaría más dolor. La anestesia general también tiende a causar relajación muscular, lo cual tiene ventajas adicionales cuando se requieren los rayos X.

A veces se utilizan anestesia local y anestesia general juntas para el mismo procedimiento. Por ejemplo, algunos veterinarios utilizan anestesia general para colocar al paciente en un estado de inconsciencia y luego inyectar un anestésico local en la piel y los tejidos subyacentes donde la cirugía se llevará a cabo. El efecto adormecedor de la anestesia local puede reducir la cantidad de dolor que el paciente experimenta cuando se despierta de la anestesia general.

La evaluación preanestésica

Su veterinario puede recomendar una evaluación preanestésica antes de poner a su mascota bajo anestesia general. Este proceso generalmente no es necesario para la anestesia local. La evaluación preanestésica puede incluir un examen físico para asegurarse de que su mascota está lo suficientemente sana para la anestesia. También se puede recomendar un análisis de sangre preanestésico para ayudar a identificar problemas médicos que pueden aumentar los riesgos asociados con la cirugía o anestesia. Un análisis de sangre preanestésico puede ayudar a identificar condiciones médicas tales como infección, anemia (bajo número de glóbulos rojos), niveles bajos de azúcar en la sangre, falta de capacidad de coagulación sanguínea, enfermedad del hígado, o enfermedad renal.

Si su mascota tiene problemas médicos pre-existentes, tales como un problema del corazón, su veterinario puede recomendar pruebas adicionales para determinar si se recomienda algunas precauciones o si la anestesia debe ser pospuesta o cancelada por motivos de salud.

Algunas clínicas realizan la evaluación preanestésica en el día de la anestesia. Sin embargo, algunos veterinarios realizan esta prueba unos días o semanas antes de que la intervención sea programada. Esta es una práctica común antes de realizar un procedimiento quirúrgico electivo, tales como una limpieza dental, cirugía de esterilización, o cirugía de castración.

Inducción y mantenimiento de la anestesia general

El proceso de sedar a un paciente y su preparación para entrar en la anestesia general se llama inducción. Una vez que la inducción se lleva a cabo, el paciente se mantiene bajo anestesia general hasta que el procedimiento (cirugía, radiografías, biopsias, limpieza dental, u otro procedimiento) se complete y el paciente pueda despertar.

La inducción generalmente comienza con la administración de un sedante. Esto ayuda a relajar al paciente para proceder con el resto de las actividades de inducción. Durante este tiempo, se puede colocar un catéter intravenoso e iniciar la administración de líquidos por vía intravenosa. Una vez que el paciente se encuentra relajado, se administran otros medicamentos para "inducir" un nivel de sedación más profundo lo que conduce a la anestesia general. Si se utiliza un medicamento anestésico inyectable, este medicamento se continúa hasta que el paciente pueda despertar. Si se elije anestesia inhalante, se inserta un tubo de respiración en las vías respiratorias principales del paciente (o, a veces se coloca una máscara anestésica sobre la boca y la nariz) y se conecta a una máquina que emite una mezcla cuidadosamente calculada de oxígeno y anestésico inhalante. El paciente inhala esta mezcla hasta que se termine el procedimiento y el paciente pueda despertar.

Tanto la anestesia general inyectable y la inhalada mantendrán a su mascota dormida de manera segura y sin dolor. Sea cual sea el método de anestesia que se elija, el veterinario tomará todas las precauciones para asegurarse de que su mascota se mantenga sana y despierte con seguridad de la anestesia. Los enfermeros veterinarios observan y monitorean a los pacientes que están bajo anestesia general. Además, generalmente se utiliza equipo de monitoreo para medir constantemente el ritmo cardíaco, la respiración, el uso de oxígeno y la presión arterial.

Cuando se completa el procedimiento, el agente anestésico se interrumpe y el paciente es monitoreado hasta que esté completamente despierto y recuperado de la anestesia.

¿Cuáles son los beneficios y los riesgos de la anestesia?

Mantener a los pacientes libres de dolor durante la cirugía es un objetivo importante de la anestesia, pero hay muchos otros. Si un gato tiene una lesión que es demasiado dolorosa para ser examinada con el paciente despierto, la anestesia puede ser la mejor manera de facilitar un examen a fondo. Otros procedimientos, como la colocación de una férula o yeso en una pierna rota, tomar radiografías de una lesión dolorosa, o limpiar y vendar una herida grave con frecuencia se puede lograr de manera más eficiente si el paciente está bajo anestesia.

Muchos de los procedimientos dentales, incluyendo la limpieza dental, extracción de un diente infectado o roto, toma de rayos X dentales, o la realización de la restauración dental por lo general no son posibles sin anestesia.

Al igual que con cualquier procedimiento médico, la anestesia no está exenta de riesgos. Algunos pacientes pueden reaccionar negativamente a la medicación anestésica, o experimentar fluctuaciones en el ritmo cardíaco, la respiración, o la presión arterial. Su veterinario está ampliamente capacitado en la realización de la anestesia y su equipo de atención veterinaria tomará todas las precauciones posibles para asegurarse de que su mascota se despierte de forma segura. Asegúrese de discutir cualquier pregunta o duda con su veterinario.